La justicia para las personas menores de edad
¿Qué es la justicia juvenil?
Cuando la persona ofensora en un delito, tiene entre 12 y 18 años, se aplica la justicia penal juvenil. Esta justicia permite que haya un proceso diferente a cuando se trata con personas mayores de edad. Algunas de esas diferencias son:
- El proceso es más rápido.
- Cuando la persona menor de edad sea declarada culpable, se toman en cuenta las razones por las que incumplió la ley, y se proponen acciones para prevenir que se vuelva a repetir.
- Se busca la manera de aplicar la justicia y dar una segunda oportunidad a la persona menor de edad que incumplió las leyes.
- Ir a la cárcel debe ser la última opción.
Además cuando una niña, niño o persona adolescente se ve involucrada en un proceso judicial tiene los siguientes derechos:
- A realizar preguntas sobre cualquier tema que no entienda.
- Derecho a expresar sus opiniones y a defenderse.
- A que se le considere inocente hasta que las pruebas demuestren lo contrario.
- Derecho a contar con un abogado o abogada, así como asistencia económica, social y de salud, especialmente si la persona menor es la víctima o tiene alguna enfermedad o es una persona con discapacidad.
- Tiene derecho a actuar sin sentir presión o intimidación, y sin temer por su vida o la de su familia, especialmente si es testigo.
- Tiene derecho a una ayuda para reparar los daños. Puede ser dinero, atención médica, o atención de los servicios sociales.
- Derecho a permanecer en silencio.
- A que su padre, madre o persona encargada estén presentes.
- Tiene derecho a mantener cierta información en privado, según el caso.
¿Qué es la Ley de Justicia Penal Juvenil?
A partir de los 12 años y hasta los 18 años, será la Ley de Justicia Penal Juvenil la nueva ley que regule en caso de que las personas menores de edad incumplan las leyes de Costa Rica.
Con esta ley se asegura que a la persona menor de edad ofensora se le garanticen y respeten todos sus derechos. Sin embargo, también permite que se impongan las sanciones penales correspondientes, en caso de que se demuestre que la persona haya cometido un delito.
Por ejemplo, si una persona adolescente es acusada de cometer una falta, como un robo o venta de drogas, tendrá el derecho a un proceso justo de acuerdo con la ley, como por ejemplo ser defendido por una persona abogada. Sin embargo, en caso de que se demuestre que sí hubo un comportamiento delictivo, deberá cumplir con la sanción que la justicia le imponga.
